Como resultado la investigación encontró que 61,4 % de los participantes presentó síntomas de depresión y 67,7 % de ansiedad. Además, existe un mayor porcentaje de depresión en estudiantes de medicina mujeres en comparación con los hombres.

El estudio denominado “Inteligencia emocional asociada a niveles de ansiedad y depresión en estudiantes de Medicina de una Universidad pública” fue realizado en el año 2019, en las instalaciones de la Facultad de Ciencias Médicas, la muestra del mismo estuvo constituida por un total de 276 casos, correspondientes a estudiantes de la carrera de Medicina y Cirugía.

Según la investigación, la carrera que siguen es el principal factor para depresión o ansiedad en estudiantes de ciencias de salud, pero los investigadores encontraron en aquellos estudiantes con buena inteligencia emocional, menos síntomas físicos, de ansiedad y depresión.

En el trabajo se evalúo a través de la Trait Meta-Mood Scale de 24 ítems (TMMS-24) el metaconocimiento de los estados emocionales; en concreto, las destrezas con las que podemos ser conscientes de nuestras propias emociones, así como de nuestra capacidad para regularlas. La TMMS-24 contiene tres subescalas con 8 ítems cada una de ellas: atención emocional (capacidad de sentir y expresar los sentimientos de forma adecuada), claridad de sentimientos (capacidad de comprender bien los estados emocionales) y reparación emocional (capacidad de regular los estados emocionales correctamente).

Por otra parte, los niveles de ansiedad y depresión fueron evaluados con la Generalised Anxiety Disorder Assessment (GAD-7) que es una escala de siete ítems que evalúa síntomas generales de ansiedad. Con ella se califican los problemas relacionados con la ansiedad durante dos semanas previas a la administración del cuestionario.

También los profesionales utilizaron la Beck's Depression Inventory - second versión (BDI-II), que es un instrumento autoaplicado de 21 ítems, diseñado para evaluar la gravedad de sintomatología depresiva en adultos y adolescentes. El mismo consiste en que en cada uno de los ítems, la persona tiene que escoger la frase que mejor describe su estado durante las últimas dos semanas, teniendo como opción cuatro alternativas ordenadas de menor a mayor gravedad.

En conclusión, los profesionales consideran que se debe seguir investigando acerca de la salud mental de los estudiantes de Medicina del país, principalmente en lo que refiere a aspectos de prevención y diagnóstico precoz. Asimismo, tomando en consideración que la inteligencia emocional afecta la salud mental, la misma debe también estudiarse y reconocerse a lo largo del grado.

La depresión es una de las enfermedades con más altos índices de incidencia en el mundo y es la principal causa de discapacidad a nivel mundial, afectando las relaciones interpersonales y la capacidad de afrontar problemas en el ámbito laboral. Por su parte, los trastornos de ansiedad son los trastornos mentales más prevalentes en la población general e incluyen, entre otros, al trastorno de pánico y al trastorno de ansiedad generalizada. Estos trastornos se asocian a una morbilidad significativa y, habitualmente, son crónicos y resistentes al tratamiento. 

Mientras que, La inteligencia emocional se define como la capacidad de percibir, comprender y controlar nuestras emociones y la de los demás o como un conjunto de habilidades que pueden ser aprendidas con el fin de poder guiar los pensamientos y la interacción social.

Los investigadores que llevaron a cabo el estudio son: Julio César Torales, categorizado en el Programa Nacional de Incentivo a los Investigadores (PRONII) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT), Nicolás Ayala Servín, Marcia Antonella Duré Martínez, César Urizar González, Ariel Insaurralde-Alviso, João Mauricio Castaldelli Maia, Antonio Ventriglio, José Almirón Santacruz y Oscar Enrique García.